Ya dijo alguien, con mucha propiedad, que “el sello postal es un
eslabón de unión y comprensión entre los pueblos, toda vez que lleva en sus
motivos mensajes de amor y paz entre los hombres”.
Empezamos este nuevo año celebrando la Paz, la unión y la concordia
entre las personas de todas las razas, géneros, creencias y condiciones
sociales. Y no por nada se escogió, para marcar el Día Mundial de la Paz, la
fecha del 1 de enero, para que la humanidad no se olvide que ésta debe ser una
lucha y un compromiso de cada uno de nosotros, a lo largo de los 364 días que
se siguen.
La historia de la Federación Interamericana de Filatelia – muy rica en
interesantes pasajes, que se van poco a poco develando – trae también, desde
sus albores, un compromiso muy claro con la busca de la Paz.
Filatelistas de nuestro Continente – como también aquellos que, en
todas partes, coleccionan sobre ese tema – deben conocer unas emisiones
postales de la primera mitad de los años setenta (especialmente de México), que
traían el mensaje Filatelia para la Paz.
Hoja-recuerdo de la
EXFILMEX 74 UPU (México, 1974)
Pero algo que muy pocos saben es que la idea para que se hicieran
tales emisiones nació de una propuesta sometida a la Primera Asamblea Plenaria
Anual de la FIAF (realizada en Bogotá el 1º de diciembre de 1969, con ocasión
de la EXFILBO’ 69), que decidió
solicitar a los gobiernos de nuestro Continente (entiéndase, a sus
administraciones postales) que produjeran piezas postal-filatélicas con la
frase Filatelia para la Paz, “para
conmemorar las exposiciones filatélicas interamericanas que se efectúen en el
futuro”, conforme lo atestigua Emilio Obregón en uno de sus escritos.
Por supuesto, dichas exposiciones eran, por sí solas, una clara
demostración de que los ideales de coexistencia armónica y pacífica, también
por medio de la Filatelia, era posible y debería irradiarse.
Más se comentará sobre las emisiones Filatelia para la Paz en una próxima edición de este noticiero.