Sería injusto, al concluir esta serie de “notas históricas”, no
referir y enaltecer el invaluable trabajo documental legado en los escritos de
algunos hombres “de buena pluma”, además de brillante capacidad de análisis e
incuestionable sensibilidad para registrar, para la posteridad, hechos
importantes de nuestra historia.
Empezando por Emilio Obregón, quien escribió (especialmente en la Revista FMF) fidedignas crónicas sobre
las primeras “interamericanas” y, más que todo, comentarios e informes sobre
las Mesas Redondas que él introdujo y cuidó que se llevara a cabo en todas las
exposiciones FIAF.
A su vez, Alvaro Bonilla Lara, costarricense radicado por largo tiempo
en Chile, ayudó a hacer de Chile
Filatélico, con sus crónicas de muy agradable lectura, uno de los mejores y
más completos repositorios de la historia de nuestra Federación continental.
Mucho ya hemos escrito aquí sobre la contribución legada por este gran escritor.
Ya Manuel María Risueño, chileno de nacimiento y “argentino” por
adopción, hombre de gran saber jurídico (colaboró como Consultor Jurídico de la
FIAF en sus primeros años), nos legó también muy buenos textos en sus crónicas
y relatos sobre hechos de la FIAF, en sus años.
Emilio Obregón, Alvaro
Bonilla Lara y Manuel María Risueño
Hemos aquí hablado de tres baluartes de nuestra Federación, quienes
fueron también Presidentes de la misma.
Pero no pudieran faltar otros dos personajes, brillantes secretarios
de la FIAF, quienes nos legaron la “memoria oficial”: el colombiano Jairo
Londoño Tamayo y el costarricense Ricardo Alvarez Pallejá.
Jairo Londoño, aunque no hubiera, él mismo, publicado crónicas (que
hayamos visto), fue quien redactó, en sus actas, todo lo de relevante de
nuestra historia, documentos éstos que servían de base al trabajo de otros autores.
En cuanto a Ricardo Alvarez, además de preparar también las Actas, se
permitía, más allá de las informaciones objetivas y “desapasionadas” que tales
documentos demandan, emitir conceptos y realizar análisis (muy lúcidos, a
propósito) sobre la vida interna de la FIAF, que los publicaba en editoriales y
artículos de Costa Rica Filatélica.
Jairo Londoño Tamayo y
Ricardo Alvarez Pallejá
Fueron éstos, a nuestro juicio, los más destacados cronistas de la
primera década de existencia de la FIAF. Al mencionarlos aquí, nos preocupamos
de citar también – por deber de justicia – las mejores fuentes bibliográficas
en las que quedaron publicados sus preciosos escritos. Que esto sirva de base a
otros que quieran, algún día, retomar este modesto trabajo, mejorarlo y
publicar algo más completo, quién sabe, en alguna obra editada por la propia
FIAF.