En las notas FIP SE PRONUNCIA SOBRE TAMAÑOS DE HOJAS DE EXHIBICIÓN
y LA “HOJA IDEAL” PARA MONTAR UNA COLECCIÓN TEMÁTICA,
que estuvieron entre las más leídas en la edición anterior, comentamos que la
definición en cuanto al tamaño de hoja a ser adoptado en una colección temática
es, esencialmente, una cuestión de libre elección del expositor, teniendo en cuenta variables muy
particulares que se aplican a cada caso, ya sea en función del tipo de
materiales postal-filatélicos que se utilizan,
ya del tratamiento dado al tema, o de criterios de naturaleza estética, etc.
Lo que es absolutamente cierto es que toda colección que tenga mérito
intrínseco reconocido (entiéndase, “en el conjunto de la obra”) siempre habrá
de alcanzar buenas medallas y puntajes, sin importar si ha sido montada en éste
o en aquél formato de hoja.
Como prueba de ello, recorremos algunos ejemplos de jurados “team
leaders” FIP, que son también expositores y han conquistado importantes
medallas y premios con colecciones cuyas hojas se presentaban a 16 por marco
expositivo (tipo A4 o el 23 x 29 cm), 8 (“doble hoja”, como la A3 o la de 46 x
29 cm), o 12 (ancho intermedio entre los dos mencionados, 31 x 29 cm).
En el primer grupo (16 hojas por marco, sin que eso signifique que no
pueda eventualmente usar alguna doble hoja, cuando se quiera exhibir piezas
mayores), podemos mencionar a Bernard Jimenez, Giancarlo Morolli, Joergen
Joergensen, Albrecht Zimmermann, Joachim Maas y Wolf Hess.
Hojas de colecciones de Joergen Joergensen, Giancarlo
Morolli, Albrecht Zimmermann y Bernard Jimenez
En el segundo (8 hojas por marco), pueden ser mencionadas, por
ejemplo, las colecciones de Jonas Hällström.
Hojas de colecciones de Jonas Hällström
Y en el tercer grupo (12 hojas por marco), el más conocido es Damian
Läge, quien innovó con dichos tamaños para sus colecciones sobre aves.
Hojas de colecciones de Damian Läge
Pero si pasamos también al amplio universo de expositores temáticos
que compite mundo afuera, vamos a ver que todos siguen ganando medallas de los
más variados tipos (y también premios, cuando es el caso), según lo que
merezcan sus respectivas colecciones cada vez que son expuestas.
Se puede afirmar, por lo tanto, que el tamaño de hoja utilizado por los
expositores temáticos es solo un detalle que, objetivamente, “ni suma, ni
quita”, como se suele decir, en el proceso evaluativo. Y así seguirá siendo.